lunes, 7 de julio de 2008

Scaramanzia


Parece que hacia falta viajar tan lejos para buscar eso que no ronda por el barrio, ese instante de parálisis neuronal neutral en el cual todo tu estado estacionado, o dormido, se revoluciona. Quedás en coma, inmóbil, generando una imploción en todo tu cuerpo, de pies, a cebeza, la misma que intentaba fijar la mirada perdida en sombras chinescas, en el oasis.
Ese latido vuelve a generar lo mismo que sentías perdido; genera, revoluciona, sorprende y motiva millones de cosas que solo se desifran indesifrables.
Un verdadero enigma. Y miedo.
Increiblemente las cosas suceden el el momento y el lugar menos pensado, SHOCK!
Sigo esperando respuestas de mis propios pensamientos que seguramente despues olvide, pero tengo la certeza que surgirán cada vez que esto pase por en frente de mis ojos, o vuelva a verlo en sueños, como en todo estos ultimos y tortuosos años.
Sigo siendo eso que siempre buscaste, sigo siendo ese glaciar vulnerable a ese pequeño gran maldito calor.
Guardo en los bolsillos de una campera vieja, un poco de miedo y todo el orgullo que pueda caber; quizás sea más felíz cuando pueda desprenderme de ellos.
Quizás sea más feliz si vuelve a suceder.
Y quizás, solo haya que esperar a ver lo que el tiempo quiera devolverte, o quitarte; y dejar que el destino siga su rumbo sin modificarlo.
La ansiedad es algo que corroe estos dias grises de invierno, pero desde hace muchos inviernos.














Me voy a ir con vos, bien lejos de este mundo.









Apagó sus ojos tristes y luego embarcó.
Recuerdos que mienten un poco, (siempre fué así)
Nuestro miedo helará este infierno creo..
Sopla un viento frío en la ciudad.











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